AL COMPAÑERO RAUL AMANCIO MARTINEZ

Señor Martínez: El pasado 31 de Agosto usted gravó un video/mensaje y se lo envió a los trabajadores y a los Dirigentes del Sindicato. Una vez más usted intenta aclarar y en vez de lograrlo oscurece más su situación. En el mismo usted expresa que le llegan ciertas versiones mal intencionadas referidas a su persona que solo persiguen el daño Institucional, que las cuales son carentes de veracidad, sospechosamente erróneas, que son infundadas y acusa a la oposición.

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Mi estimado Raúl, tendría que haber sabido a esta altura, que nada cabe esperar de los hombres que entran a la vida sin afiebrarse por algún ideal y que sin cobardía no hay maledicencia, porque el que puede gritar cara a cara una injuria, el que denuncia a voces un vicio ajeno, el que acepta los riesgos de sus decires, no es un maldiciente, por lo tanto, mientras continúen las arbitrariedades, los atropellos y los hechos de corrupción, usted seguirá recibiendo verdades que son denuncias y no “versiones” como usted muy mal señala, porque de nosotros aún se espera y esperamos, nuestra fiebre sigue siendo alta, nuestro ideal permanece intacto y nuestra dignidad inquebrantable, entiéndase, no venal como la de Usted y la de algunos de sus colegas.