Tesoros de Rosario

Tesoros de Rosario: un palacio en bulevar Oroño, los primeros fernet llegados de Italia y un fantasma en el "cielito".

En otro informe especial del programa Cada Domingo, una recorrida por una mansión palaciega en un lugar privilegiado de la ciudad. Además, su punto de contacto con una bebida hoy tan popular como el fernet. Y un mito que vive en el altillo de la mansión.

Un palacio imponente ubicado en pleno bulevar Oroño. Con historia y maravillosa arquitectura, llama la atención de quienes transitan por la zona. Esta construcción es testigo de los cambios que atravesó la ciudad durante los últimos 100 años, sobreviviente de las múltiples demoliciones que se han hecho sobre el bulevar y donde actualmente funciona la escuela Bernardino Rivadavia. Desde Génova a Rosario, la familia Recagno se instaló en la historia de la ciudad y la casona fue reflejada en detalle en otro informe especial de Cada Domingo (El Tres) sobre los tesoros de la ciudad.

Los Recagno, familia propietaria de esta mansión, eran empresarios importadores que comercializaban diversos productos que traían desde Europa. Si bien vendían distintas mercancías, hay una en particular con la que se destacaron: fueron quienes trajeron el Fernet Branca a Rosario.

Pasó de ser una vivienda palaciega a una escuela. Se amplió en 1971, con un edificio nuevo sobre el jardín trasero. En el año 1991, pasó a llamarse Liceo Nacional Bernardino Rivadavia y en 1995 quedó su actual denominación de Escuela Provincial de Enseñanza Media Nº 432 Bernardino Rivadavia. Está declarado patrimonio de la ciudad con el Grado de Protección.

La casa la hizo construir Pablo Santiago Recagno, hijo de Santiago que nació en 1861 (tres años después de que llegue a Rosario). Proyectada por el arquitecto Ernesto Sackmann y ejecutada por la empresa de Enrique Taiana y Hno, para principios del siglo XX ya era una de las más destacadas de la ciudad. Paralelamente, Santiago falleció en Italia en 1901.

La familia Recagno, de Génova a Rosario

El 25 de enero de 1939 falleció Pablo Recagno y sus hijos, ya casados, siguieron viviendo en esta casa con sus respectivas familas hasta que, en 1946, el gobierno nacional la compra para crear allí el Liceo de Señoritas. "Los padres de Pablo Recagno, son los que vinieron a la Argentina y eran los comerciantes y que hay una nota de color que dicen que son los primero que trajeron al fernet acá, entonces hizo un crecimiento económico muy importante", detalló a El Tres Analia Cono, directora de la escuela Bernardino Rivadavia.

"La familia manda a construir esta mansión para ellos. Esta vieja casona hoy es una escuela pública media, que compartimos con un instituto terciario; es un patrimonio está reconocido como patrimonio de Rosario y nosotros tratamos de preservar toda su impronta", agregó.

Respecto de la mansión, Cono señaló que "esta familia la construye cerca de 1900 y después estuvieron los sucesores de la familia Recagno y como escuela comenzó en 1936, cuando el gobierno compra está establecimiento. En este momento era el viejo Liceo de Señoritas".

La directora de la escuela Rivadavia remarcó que "en 1971 se construyó un edificio nuevo sobre el jardín trasero; en el año 1991 pasa a llamarse Liceo Nacional Bernardino Rivadavia y en 1995 dejó de ser Liceo para convertirse en la actual Escuela Provincial número 432 Bernardino Rivadavia".

"La parte de arriba de la casona, que es donde cuentan que estaban las servidumbres, nosotros le decimos 'cielito' porque es la parte más alta del edificio y porque aseguran que es ese lugar habita el fantasma de Cielito, que pareciera que era la hija de la familia adinerada que vivía acá", agregó la mujer, creando un ambiente de misterio en la nota.

Sobre esta última creencia, Analía describió que la chica "murió quemada en esta parte y quienes creen dicen que hay una presencia de esas que nos cuidan".