Historia de mi Pueblo Chabás
Actualizado: 1 oct 2020
A la hora de ponernos a reflexionar sobre nuestro presente se nos hace prácticamente imposible dejar de pensar en nuestro pasado, aquel que desde los comienzos nos condiciona y nos ubica en el hoy de una manera determinada y no de otra. Es por esto que considero necesario presentar aquí, de manera resumida, el pasado que forma parte constitutiva de nuestro presente. Creo que no podemos definirnos hoy sin mostrar, o al menos repensar, nuestro ayer.
Para poder dar cuenta brevemente de los inicios de nuestra localidad es necesario aludir al contexto en el que emerge, pensando sobre todo, la función que la misma tiene dentro del proyecto principal de crecimiento y desarrollo a nivel nacional.
Acercándonos hacia las últimas décadas del siglo XIX se diseña el esquema económico que permite insertar a la joven patria dentro del escenario mundial. En efecto, el lugar que ocupará la región pampeana será crucial.
El rol de exportadora de materias primas (cereales) a Europa, y sobre todo a Inglaterra, ubicó en el centro de la escena las tierras fértiles que hasta ese momento “no tenían dueño”; o mejor dicho, sí lo tenían pero debido a que era necesario que las mismas estén al servicio del capitalismo, que comenzaba a gobernar nuestra economía y que ya gobernaba al viejo mundo, fueron expropiadas de sus auténticos amos.
El devenir al que estuvieron expuestos los verdaderos dueños de estas tierras, los indígenas, no fue menos trágico que el resto de las tierras que hoy conforman nuestro país.
Así, el paisaje pampeano empezó a sufrir algunas modificaciones que hasta hoy pueden percibirse. Por un lado, se produce la extinción de las ocupaciones indígenas, y por el otro, las grandes extensiones de tierras ya ocupadas y utilizadas para el pastoreo son parceladas y dedicadas al cultivo de cereal. De esta manera, se pone en marcha el modelo “agro-exportador”, ubicando a Argentina como una competidora con EEUU en los mercados europeos. Para que esto funcione fue necesario ocupar el suelo con trabajadores, campesinos dispuestos a labrar las tierras, motivo principal por el cual el Estado argentino impulsó la inmigración, y dio comienzo al proceso de “colonización agrícola”.
Durante los años 1850/1870 se produjo la primera oleada de ocupación y distribución del suelo, la que se llamó “primera colonización agrícola”; y la segunda oleada fue la de la década de los ochenta, la cual adoptó sus propias características.
Si bien en los ochenta se fundan un número importante de colonias con el objetivo de poder beneficiar el desarrollo del capitalismo, años anteriores la elite política argentina se venía preocupando por el trabajo de las tierras. Ya para 1857 se dictaron leyes de arrendamientos sobre tierras públicas, en las cuales se establecía que no se podían exceder de ocho años de tenencia, reservándose el derecho de enajenarlas durante el tiempo que duraba el contrato.
Una década después, 1867, Pascual Chabás, el futuro fundador del pueblo llegó al puerto de Rosario. La situación que se vivía por entonces era bastante inquietante, epidemias, guerras y miserias azotaban la región. A pesar de esta situación poco favorable el joven Chabás decide luchar y forjar su vida en la naciente provincia de Santa Fe.
El año 80 fue significativo en la vida del fundador. En esta década se extienden las riendas del Ferrocarril Oeste Santafecino, hecho fundamental para nuestra región, ya que ubicó a la zona en la médula de la economía. El mismo permitió el traslado más rápido y efectivo de los cereales, especialmente de trigo, que tan ansiosamente esperaban los mercados ingleses. En este contexto, Don Pascual se radica en Villa Casilda, según los registros de la época, aproximadamente en el año 1879.
Mientras tanto en el Congreso se discutía la prolongación del ferrocarril, que hoy vemos surcar nuestro pueblo. Finalmente, casi una década más tarde, 1888 se decide extender la línea, así el recorrido quedó desde Rosario hasta Candelaria o Villa Casilda y desde ésta a Colonia Pampa o La Pampa (actual Chabás).
Las 3775 Has. de tierras que conforman la superficie que ocupa hoy la localidad, en ese momento eran propiedad de Carlos Casado de Alisal fundador y colonizador de Casilda, conocido de Pascual Chabás.
Éste ya hacía unos quince años que residía en Argentina, contaba con un capital importante para poder comprar las tierras que poseía Carlos Casado. El negocio le resultaba interesante debido que podía luego revender las tierras a colonos o comerciantes. Carlos Manfredi en Señales Históricas transcribió el documento en el que quedo asentado la compra de las tierras de Chabás a Carlos Casado:
“...el 7 de noviembre de 1881, mediante escritura labrada en Rosario, Chabás compró a Casados 629 hectáreas correspondientes al noroeste de la franja citada,... un terreno ubicado en el Dpto. Rosario, sobre el paraje denominado Arroyo del Saladillo... (sic)”. (Esc. Lisandro Paganini, Rosario, folio 472. Año 1881. en Manfredi, c. Señales históricas. Rosario, 1998).
Un tiempo después fueron vendidas las restantes hectáreas (3146) a los señores César Benedetti, Aquiles Vicario y Francisco Fontana, pero al cabo de un año Pascual Chabás fue comprando todas las tierras hasta quedarse con las 3146 has.
Si bien en los párrafos anteriores expliqué que debido a la transición de país pastoril a agrícola por la demanda venida desde Inglaterra se abre el proceso de colonización, es decir, asentamientos de colonos dedicados a trabajar la tierra, sobre todo a cultivar cereales, este proceso tomó un rumbo diferente en 1880.
Como dije antes, la colonización de la década del 50 tenía un impulso diferente al que tuvo la de los ochenta. La colonización de la tierra significa el asentamiento de colonos en tierras productivas, sin fines de lucro, especulación o afianzamiento político. Las primeras localidades, como por ejemplo, Colonia Esperanza fundada por Araón Castellanos o, inclusive, Villa Casilda por Carlos Casado sí tuvieron un sentido progresista, pero luego de 1880 el proceso colonizador sufrió una permutación, comenzó a generalizarse el comercio a través de la venta de tierra.
Se sistematizó, de esta manera, la venta de grandes extensiones de tierras que luego fueron arrendadas o subarrendadas a colonos. El territorio que compró Pascual Chabás se encontraba ocupado por estos trabajadores arrendatarios y golondrinas que deambulaban de un pueblo a otro buscando asentarse definitivamente, lo cual se tornaba muy difícil debido al sistema de tenencia de tierra que eliminaba toda posibilidad el acceso a las mismas.
Con el tiempo se tomó como día fundacional al 7 de Noviembre de 1883 debido a que esa fecha es la registrada en el primer mapa de la colonia, pero en realidad no se puede hablar con firmeza del día exacto de fundación.
Para este momento el pueblo tenía por nombre La Colonia, luego en 1888 Carlos Casado realiza una “segunda fundación” cuando lo denomina Chabás -Villa Chabás o Estación Chabás-. Esta refundación tuvo lugar en el marco de la extensión de las líneas férreas a la que antes hice referencias. Pascual Chabás, para el ramal y la estación tuvo que ceder las tierras que pertenecían a su colonia, así lo atestigua la escritura de venta respectiva:
“.. En la cuidad de Rosario de Santa Fe a seis de febrero de 1888, ante mí el escribano autorizante y testigo que suscriben compareció don Pascual Chabás, casado, vecino de Villa Casilda, de cuyo conocimiento y capacidad legal doy fe, y dijo: que por la cantidad de ochocientos sesenta y un pesos cuarenta y siete centavos nacionales legal que en este acto recibe de manos de Eloy Palacios representante de Carlos Casado, concesionario del Ferrocarril Oeste Santafecino, dos fracciones de terrenos sujetos a expropiación, para la prolongación del citado ferrocarril en dirección de Melincué, una para estación y otra para la vía del mismo, situadas en el departamento San Lorenzo en esta provincia...(sic)”. (Archivo de los tribunales de Rosario. Escritura del 7 de noviembre de 1881. en Grela, P. La Pampa. Génesis de la colonia y el pueblo de Chabás. p. 41.Rosario, 1983).
Para la reconstrucción de este proceso de la historia de nuestro pueblo fue de gran utilidad consultar el periódico local, Millennium, en el cual se publicó, en el mes de noviembre del año 2002 una crónica realizada por uno de los ciudadanos que más directamente está ligado al devenir de la localidad y a su administración: Carlos Vitali. Expresa en su relato que el objetivo principal de la extensión de la línea del ferrocarril fue el transporte de los granos desde nuestra zona hasta el puerto y de ahí al mundo. Si bien la función y el objetivo principal de la extensión fue económico, no podemos dejar de pensar en la importancia que el mismo tuvo en la conexión entre los distintos pueblos y parajes. Como lo relata Vitali en su crónica, el viaje desde la Rosario hasta Arequito fue un paseo que algunos ciudadanos de la época disfrutaron:
“...invitados por el Señor Eloy Palacios, en representación del señor Carlos Casado, tomamos parte el domingo, en un paseo que se efectuó en tren expreso, desde Rosario a Arequito. ... Se trataba de viajar en un tren rápido y existía la posibilidad de un abundante lunch y de exquisitos vinos”. (Periódico Millennium, noviembre de 2002. Crónica redactada por Carlos Vitali).
Así, comenzó a disfrutarse de los beneficios del riel, si bien toda la población se benefició de la prosperidad y el progreso que el mismo trajo, no todos pudieron gozar de la posibilidad de dar el lujoso paseo que los llevaría hasta Arequito. Así lo dice la crónica:
“La invitación se reducía a los propietarios de los campos que atraviesa la vía férrea, a los representantes de la prensa, a los miembros del directorio del ferrocarril y a varios comerciantes de esta plaza”. (Ibídem)
De esta forma, sólo un grupo minúsculo disfrutó del viaje, el resto del pueblo contempló atónitamente del espectáculo.
Desde 1883 en adelante comenzó a rodar la rueda de la historia. A lo largo del tiempo los distintos acontecimientos que sacudieron a nuestro país tuvieron repercusión sobre los avatares del pueblo, y así se fue completando el inventario que reúne nuestra historia.
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