Cafayate

Caracterizado como punto central de los Valles Calchaquíes, Cafayate ocupa un lugar estratégico en el que convergen tres provincias: Salta, Tucumán y Catamarca, situación que lo engalana con el aporte de diversas culturas permitiéndole poner al servicio de sus visitantes mucho más que belleza natural.

Ubicado aproximadamente 180Kms. al sur de Salta Capital, este “pueblo que lo tiene todo”, como asegura su nombre, presenta en el verano temperaturas primaverales y escasas heladas en invierno, consumando un clima propicio para la curación de enfermedades respiratorias.

El legado de los diaguitas que habitaron la región se encuentra materializado en pinturas rupestres que pueden encontrarse en más de un sitio dentro del territorio de Cafayate. El Divisadero, al sudeste, y las Cavernas de San Isidro, hacia el oeste, son sólo ejemplos de la belleza cultural que reside en esta ciudad. Dos museos con exposiciones que abarcan diversas áreas, y una esbelta Catedral completan este circuito.

La ciudad de Cafayate, Salta, es reconocida mundialmente por su clima, sus paisajes y la amabilidad de sus habitantes; pero tiene aún otro protagonista destacado: el vino Torrontés. La combinación perfecta entre temperatura y humedad, permite la obtención de uva con un sabor dulce profundo, haciendo de las bodegas de la región, centros de atracción turística que ningún visitante deja de degustar.

La Quebrada de Las Conchas, con su multiplicidad de colores y formas; la imponente caída de agua en las Cascadas Río Colorado; la majestuosa vista panorámica desde el Cerro Santa Teresita; constituyen excursiones imperdibles en el circuito natural de Cafayate, Salta.

Dueña de una infraestructura de servicios capaz de convertir su estadía en la más placentera que haya experimentado, Cafayate actúa como un auténtico imán que atrae anualmente a miles de visitantes, muchos motivados por el convocante festival folclórico “Serenata a Cafayate”.

Historia El origen de Cafayate dataría de 1826, cuando Doña Josefa Antonia Frías de Aramburu donó un terreno de su propiedad, que ya llevaba ese nombre, para la fundación de un pueblo con su iglesia y casa para sus curas. Así lo cuenta la tradición oral que se ha transmitido de generación en generación.

Cafayate ha soportado distintas interpretaciones. Una de ellas asegura que proviene de la lengua quechua significando “Cajón de Agua”; otra expresa que deriva de la voz cacana Capac (Jefe)-Yaco (Agua), significando aproximadamente “Lago del Cacique”. Partiendo de estas dos versiones surge la más aceptada por los lugareños, la cual considera que Capac equivale a riqueza y también a pueblo. De este modo Cafayate es conocido como El Pueblo que lo tiene todo.