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Foto del escritorMuseo Negro

Treblinka, campo de concentración y de exterminio


Treblinka, campo de exterminio

Treblinka fue uno de los múltiples Campos de Concentración (y de Extermio) que los nazis crearon en Polonia.


Hace poco un grupo de investigadores ingleses, que llevaban tiempo haciendo estudios, fotografías aéreas y sobre el terreno, detectaron grandes movimientos de tierra y han confirmado la existencia de restos humanos, fosas comunes y cámaras de gas en Treblinka.


Esta población a 80 km de Varsovia, fue uno de los primeros Campos de exterminio y es utilizado por los negacionistas del holocausto como argumento, ya que antes de huir, los nazis exterminaros a todos los prisioneros, destruyeron las cámaras de gas, removieron toda la tierra y lo taparon todo, para dejarlo como una pequeña llanura dentro de un bosque. Y es por ello que dicen que allí no pasó nada.



Gracias al equipo de la Universidad de Staffordshire, la oscura y dolorosa historia de Treblinka ha sido desenterrada.


Queda muy poco de lo que fue el campo de concentración de Treblinka, situado en una pequeña población, con el mismo nombre, aunque solo nombrarlo me recorre un escalofrío por la columna.



Desde 1959 a 1964 fue construido un memorial en los terrenos del antiguo campo de exterminio y un museo.


El memorial está formado por grandes piedras con nombres de las ciudades de donde venían los que allí murieron.

Se calcula que en el campo fueron asesinados un millar de personas, judios de toda Europa y miles prisioneros polacos, hombres, mujeres y niños.


Trenes llenos de gente llegaban cada día a Treblinka y salir… solo unos pocos que lograron escapar tras una revuelta, muy pocos pudieron contarlo, menos de 100, ahora las pruebas corroboran su historia, sus recuerdos y datos.


A 2 kilómetros andando desde el Memorial, que corresponde con Treblinka I, el campo de concentración, se encuentra, adentrándose en el bosque los restos de las estancias del campo de exterminio, Treblinka II, unas placas con información, un pequeño mapa y algo de suelo de lo que fueron los edificios. Ahora tras las catas de los científicos, además de los cimientos y baldosas de las cámaras de gas, se han encontrado restos humanos, unos calcinados y otros no.

Vas andando por el bosque, siguiendo las flechas y llegas a una gran explanada, allí indica que estaban las estancias de las mujeres, los comedores y las cocinas, que casi es lo que mejor se conserva porque es un agujero en el suelo, vallado con cinta para que no caiga nadie, porque poca gente lo visita y para encontrarlo cuesta bastante.

 Cuando dices que quieres ir a visitarlo, la gente te responde “Pero si allí no hay nada!

“solo” un millar de almas, enterradas bajo la perfecta planificación del horror, con los arboles del bosque como únicos testigos.

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