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Creado el 03-05-1938 - Evacuado el 20-04-1945 - Liberado el 23-04-1945 por tropas norteamericanas - Fallecidos: 30.000.
LOS COMANDANTES DEL CAMPO
HISTORIA DEL CAMPO
Establecido como el cuarto campo de concentración creado fuera de las fronteras alemanas, Flossenbuerg se diseñó en un principio como lugar de extracción del granito de sus canteras y que serviría para ser remitido a Alemania y utilizarlo en las grandes construcciones monumentales que Hitler encargó a su arquitecto principal: Albert Speer.
La mano de obra, por supuesto esclavizada, comenzó con 100 prisioneros judíos y delincuentes llegados el 4 de Mayo de 1938 de Dachau (Alemania) pero con las ampliaciones para abastecer a diversas fábricas que se asentaron en la zona empezaron a llegar prisioneros de guerra de diversas nacionalidades aunque destacaron los soviéticos que, por su enorme número, fueron destinados a los barracones números 11, 12 y 13 que se encontraban aislados de los 13 restantes que componían el campo.
Respecto a su población reclusa y en los comienzos del campo, esta aumentó y disminuyó considerablemente ya que si en Septiembre del año de su apertura llegaron otros 981 prisioneros no judíos desde Dachau (Alemania) y entre finales de 1941 hasta finales de 1942 llegaron otros 1.600 reos polacos compuestos principalmente de miembros de la resistencia polaca, las ejecuciones masivas mermaban en gran medida el número de prisioneros. Basta señalar que entre Febrero y Diciembre de 1941 fueron asesinados un gran número de ellos eliminando a la mitad de los reos polacos por delitos comunes y a más de 1.000 rusos.
Posteriormente, en Agosto de 1942 se levantaron en una zona apartada del campo principal otros 4 edificios de madera y sin ventanas con una capacidad total para 2.000 personas en los que serían alojados los prisioneros rusos de forma definitiva. En total, el complejo de Flossenbuerg y sus subcampos albergaron a la vez unos 40.000 prisioneros.
Durante la madrugada del 2 de Mayo de 1944, en el subcampo Muelsen, un grupo de 235 prisioneros de guerra soviéticos intentaron una fuga eliminando a unos guardianes y prendiendo fuego al barracón en donde se alojaban pero no pasaron de unas decenas de metros; 195 murieron durante el intento y los 40 restantes fueron ejecutados posteriormente.
Desde el 1 de Septiembre de 1944 Flossenbuerg comenzó a recibir a mujeres de la SS que por un lado servirían como guardias en los subcampos y vigilantes en las fábricas y por otro lado aprenderían los sistemas de control y dominio sobre los prisioneros para luego ser destinadas a otros campos en donde poner en práctica los métodos aprendidos. En total unas 500 mujeres de la SS pasaron por Flossenbuerg.
TRABAJO Y MUERTE
La explotación de prisioneros era el motivo principal de la existencia de Flossenbuerg; si bien las canteras, que suministraban más de 12.000 metros cúbicos de granito al año, eran objetivo primordial no lo fueron menos las industrias bélicas que desde 1943 se asentaron en los alrededores del campo para abastecerse de tan barata mano de obra.
De los barracones de Flossenbuerg y sus subcampos salían diariamente miles y miles de prisioneros hacia las fábricas de Astra, Auto Unión, Opta Radio y Zeiss Ikon para trabajar como esclavos así como en las acerías Krupp y en la fábrica de aviones Messerschmitt en la que, en Marzo de 1944, se encontraban trabajando más de 2.200 prisioneros a la vez en dos turnos de 11 horas y media de producción incesante cada uno.
Para estas fechas y dado el alto valor que se daba a la producción bélica, las canteras fueron declaradas objetivo secundario de trabajo y hasta los últimos días de Flossenbuerg solamente trabajaron allí menos de un millar de prisioneros.
El total pasaron por Flossenbuerg 96.716 prisioneros resultando muertos 30.000 de ellos; en este número están incluidos los responsables del atentado que el 20 de Julio de 1944 intentó matar a Hitler; empezando por el Almirante Wilhelm Canaris, pasando por los generales Friederich von Rabenau y Hans Osterel, los capitanes Theodor Strunck y Ludvig Gehre así como el magistrado Karl Sack y Dietrich Bonhoeffer, el 8 de Abril de 1945 se les sometió a un juicio en Flossenbuerg siendo la acusación de "alta traición" y una sentencia común de muerte por lo que al día siguiente fueron ejecutados.
Respecto a las ejecuciones en el campo fueron escasas hasta Abril de 1944, fecha en que comienzan a aumentar de manera escalofriante llegando a efectuarse casi un centenar diarias; los motivos para tales asesinatos eran variados pudiendo ser por sabotaje en las fábricas, soldados desertores, prisioneros de guerra o reos no aptos para trabajar como los agotados, enfermos y los llegados desde otros campos para ser asesinados directamente. Para hacer desaparecer toda esta ingente cantidad de cadáveres se levantó fuera del campo un crematorio.
EL FIN DE FLOSSENBUERG
El 14 de Abril de 1945 las listas de prisioneros recluidos en Flossenbuerg es de 45.813 siendo una tercera parte mujeres; es el momento de preparar la evacuación del campo. Al día siguiente sale un gran transporte cargado de prisioneros con destino a Dachau (Alemania) y el 17 otros 1.700 reos judíos abandonan Flossenbuerg; siendo el día 19 una larga columna de prisioneros emprende la marcha de la muerte hacia Dachau (Alemania) quedando solamente en el campo 10.662 detenidos, algunos de ellos enfermos y moribundos. Al mediodía llega, procedente del campo de Buchenwald (Alemania), otra columna de unos 7.000 prisioneros.
En la tarde del 20 de Abril de 1945 se forman 4 marchas de la muerte con un total de 14.500 prisioneros; 3 de ellas compuestas por unos 4.000 y una cuarta por el resto, 2.500; más de 7.000 prisioneros fueron asesinados durante las marchas. De estos 7.000 últimos y al paso por la localidad de Namering (Alemania) la SS asesinó de forma brutal y en escaso tiempo a 800 prisioneros cuyos cuerpos fueron introducidos en fosas comunes. A mediados de Mayo de 1945 las tropas norteamericanas descubrieron las fosas y tras exhumar los cadáveres obligaron a los habitantes de Namering a pasar ante tan triste paisaje.
El 23 de Abril de 1945 las tropas norteamericanas atraviesan las puertas de Flossenbuerg; solo pudieron liberar a los 1.600 prisioneros enfermos y hambrientos que fueron desechados para las marchas de la muerte.
Hoy en día se conservan algunas edificaciones como centro conmemorativo.
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