Gustavo Gómez se plantó y dijo que quiere jugar en Boca: ¿lo dejará el Milan?

El Xeneize quiere sumarlo a préstamo. Entre hoy y mañana podría haber una definición por la situación del defensor central.

El central paraguayo Gustavo Gómez quiere jugar en Boca. Es el refuerzo que tanto anhela Guillermo Barros Schelotto para tener más variantes en la última línea de cara a un semestre en el que buscará ganar la Superliga y arrancar derecho la Copa Libertadores.

Las negociaciones con el Milan vienen muy lentas pero se espera que en las próximas haya una definición. Para bien o para mal. Obviamente en La Boca quieren un final feliz para poder darle el gusto a los Mellizos.

El club italiano rechazó las últimas ofertas por Gómez y Boca ahora acercó una última: préstamo por 18 meses más una obligación de compra por 4 millones de euros si el jugador cumple con una serie de requisitos. Y uno de esos es que juegue una determinada cantidad de partidos.

Milan no quiere cederlo bajo ningún punto de vista. Pero esta posibilidad de un préstamo extenso más una obligación de compra podría ser una buena opción para un equipo que necesita liberar plazas de extranjeros y ver dinero por un futbolista que no rindió ni será tenido en cuenta.

El jugador está de vacaciones en Paraguay y no tiene pensado volver a Milán hasta que haya un final en esta negociación. El defensor, que fue dirigido por los Barros Schelotto en Lanús, quiere ponerse la de Boca y su deseo puede ser clave.

Hoy por hoy Guillermo cuenta con Paolo Goltz, Lisandro Magallán, Santiago Vergini y Juan Manuel Insaurralde. Estos últimos dos jugaron muy poco en el último año y corren desde atrás en la consideración del DT.